viernes, 29 de abril de 2011

La leche Argentina produce Cáncer de colon,mamas y próstata

La leche argentina produce cáncer de colon, mamas y próstata

La agresiva promoción que Monsanto realiza de sus productos biotecnológicos, desde la hormona recombinante del crecimiento bovino (rBGH) a la soja "Roundup Ready" y a sus variedades de algodón resistentes a los insectos, resulta a ojos de cualquier observador como una continuación de sus largas décadas de prácticas éticamente discutibles. Argentina y Estados Unidos son dos de los pocos países donde todavía se permite el uso de la hormona recombinante del crecimiento bovino, rBGH. Y los tambos mas grandes de Argentina siguen utilizandola pese a que, desde el año 1996 (National Press Club Washington D.C., January 23, 1996) se sabe que causa cáncer de colon, prostata y mamas. Más tarde, cientificos canadienses (en 1998) descubrieron que, las vacas tratadas con rBGH sufren mastitis, infertilidad y agotamiento. Incluso Monsanto reconoció que las vacas inyectadas con rBGH "pueden sufrir en mayor medida estos efectos", además de ovarios quísticos, trastornos uterinos y digestivos y úlceras (por lo cual la leche es bombardeada con antibioticos). Lo más grave son las consecuencias sobre la salud humana ya que el factor de crecimiento-1, IGF-1, humano es químicamente idéntico al bovino. Concretamente: Investigaciones europeas concluyeron que la rBGH y produce cáncer de mama y próstata en los seres humanos.

jueves, 28 de abril de 2011

"Somos andando"

 
Paraná, 28 de abril de 2011
 
 
Unos 500 docentes se reunieron en Federal
 
AGMER inició su propuesta de formación 2011
 
Con la participación de casi 500 docentes de distintos departamentos, comenzó ayer en Federal el curso taller  “Somos andando”,  una instancia de formación que organiza AGMER para docentes de todos los niveles y modalidades del sistema educativo. La propuesta se enmarca en el programa de Formación Política, Pedagógica y Sindical de AGMER para el año 2011, que prevé desarrollar una serie de cursos, seminarios, charlas y encuentros en distintos departamentos de la provincia. Las actividades continuarán hoy en Nogoyá y mañana en San Salvador.
 
El curso “Somos andando” es un proyecto que comenzó a desarrollarse en Paraná con importante repercusión, por lo que la Comisión Directiva de AGMER decidió este año extenderlo a toda la provincia. Se trata de un espacio de reflexión y formación compartida, con una fuerte impronta de trabajo sobre la práctica áulica tanto urbana como rural.
 
La bienvenida a los presentes y presentación de la propuesta de formación estuvo a cargo de la secretaria adjunta de AGMER, Olga Hollmann; la secretaria de Educación, Adriana Casevecchie, y el secretario general de AGMER Federal, Francisco Nessmann.
 
“Cuando nosotros hablamos de formación lo hacemos pensando que todo el conocimiento tiene que ser colectivamente construido y, al mismo tiempo, servir como instrumento de lucha”, expresó Hollmann. Y subrayó: “Hablar desde nuestra realidad y sobre ella nos llevará a reconocer cómo se construye históricamente esta realidad”.
 
La participación de unos 500 trabajadores de la educación en esta instancia, que ayer se desarrolló para cinco departamentos de la provincia, da cuenta de la necesidad real de los docentes de contar con estos ámbitos de formación e intercambio.
 
La propuesta de formación política, pedagógica y sindical para 2011, que AGMER presentó públicamente el pasado 13 de abril, se organiza bajo la consigna “construyendo soberanía pedagógica”, que se plantea como el gran desafío en la batalla cultural que deben dar los trabajadores de la educación.
 
 AGMER – CDC

viernes, 15 de abril de 2011

¿Gobierno del pueblo?,¿Para el pueblo?

Castoriadis, filosofía política y democracia


Uno de los críticos más severos de la democracia en Occidente ha sido el filósofo griego Cornelius Castoriadis. Sus reflexiones tienen que ver con el mundo central que él describe y con el periférico al cual esas reflexiones se aplican. El pensamiento de Castoriadis (que intensamente citaremos) tiene un rigor que proviene de su formación de marxista que ha leído ampliamente a Heidegger. Ve, así, en la destrucción de la naturaleza y, en última instancia, del planeta (¿acaso alguna instancia podría ser más última?) la acción esencial y devastadora del capitalismo.
Escribe: “Esta destrucción irremediable sigue: en este preciso momento, la destrucción de los bosques tropicales en calidad de especies vivientes continúa. Las medidas tomadas o consideradas para detener esta destrucción son irrisorias. De modo que hablar de dominación del hombre sobre la antroposfera y el mundo creado por él no hace otra cosa que reproducir la vieja ilusión cartesiano-capitalista-marxista del hombre dueño y señor de la naturaleza. Cuando el hombre es más bien como un niño que se encuentra en una casa cuyas paredes son de chocolate, y que se dispuso a comerlas, sin comprender que pronto el resto de la casa se le va a caer encima” (Figuras de lo pensable, p. 175, FCE).
Castoriadis –dentro de estas líneas de reflexión– se vuelca sobre el Fondo Monetario Internacional, pieza decisiva de este encuadre que el Gran Capital ha hecho del mundo y que camina hacia su implosión. “Acompañando la ofensiva Reagan-Thatcher en contra de los sindicatos y de los niveles de salarios, esta regresión permitió que los extirpadores de dientes de Chicago sacaran a relucir las antigüedades refutadas desde hace mucho tiempo (de hecho, la teoría cuantitativa de la moneda), que los expertos del Fondo Monetario Internacional hundieran algunos clavos adicionales en el ataúd de los países pobres y que el señor Guy Sorman se convirtiera en el apóstol de las Luces económicas en Francia” (p. 169).
Pero donde el pensamiento de Castoriadis logra mayor hondura y actualidad es en la relación que establece entre el dinero y la política. Por ejemplo: ¿cómo llega un político, o, pongamos, un senador norteamericano, a ocupar un lugar en el Congreso? Las elecciones, ¿terminan expresando la voluntad de la ciudadanía o la de las grandes corporaciones? Castoriadis ofrece un punto de vista ya célebre en politología: “Por cierto hay elecciones en Estados Unidos para el Senado y la Cámara de los representantes (...) Una vez elegido senador uno se convierte en senador de por vida, salvo que ocurra un accidente. ¿Por qué? Porque ser elegido senador exige dinero, mucho dinero para el financiamineto de las campañas electorales, y este dinero será suministrado por los Comités de Acción Política (Political Action Committees, PAC) previstos por la ley estadounidense, que reglamenta sus actividades y los límites de las contribuciones económicas (...) ¿Quién suministra dinero a los PAC?”
Aquí está el centro de la cuestión. Hasta ahora tenemos: un senador para llegar al Congreso necesita dinero. Ese dinero se lo suministran los PAC. El dinero es imprescindible para la campaña política. La cuestión es: ¿quién le da el dinero a los PAC, o, en nuestro caro y defendible idioma: Comités de Acción Política? “Probablemente (dice Castoriadis con lógica contundente) no se trate del vagabundo drogadicto del vecindario. Probablemente se trate de gente que tiene, al mismo tiempo, dinero y razones para entregarlo al Pac republicano y no al demócrata, o viceversa. Y sabe quién entregó tal cantidad de dinero así como se sabe con precisión qué ley votó tal senador” (p. 158). Y he aquí la afirmación axial de Castoriadis: “El dinero será suministrado por aquellos que lo tienen para aquellos que votan como corresponde”. De este modo, ocurre algo evidente e inevitable: “Cuando un senador dispone del dinero de un PAC más rico que el PAC de su adversario, está prácticamente asegurada su reelección”.
Esta ecuación entre dinero y política transparenta el mecanismo que todos conocen o intuyen pero que pocos analizan como Castoriadis. El dinero hace la política. La hace sobre a través del financiamiento de las campañas electorales. Si el candidato republicano se consigue más metálico vencerá al demócrata, porque tendrá más medios para la campaña electoral y representará intereses más poderosos.
Acaso el pensamiento de Castoriadis sirva para entender no sólo la actual coyuntura argentina, sino también buena parte de nuestra historia política.

Una porción de realidad brutal (tomado de Agmer Maria grande)

Algunos elementos de la inflación
Enviamos Trabajo de los compañeros del PTP Entre Ríos, el cual compartimos plenamente
Espacio de pensamiento, reflexión y acción socialista

Algunos datos revelados acerca de la inflación desde 2003 en adelante. Esta echo en base al archivo histórico del Diario de Paraná, que existe en la Biblioteca Provincial de Entre Rios.
De allí relevamos y comparamos las ofertas de los hiper coto, walt mart y carrefou,r publicadas desde 2003 hasta la fecha.
Saludos
Juventud PTP Entre Rios.
Correo del PS a Actividad SXXI-FAE

jueves, 14 de abril de 2011

Formación Política, Pedagógica y Sindical, que beneficiarán a más de 10.000 educadores


Con un proyecto trascendente y transformador, Agmer lanzó cursos de formación Política, Pedagógica y Sindical

Con una visión propia de la realidad de los entrerrianos en el contexto de la Argentina  y America Latina, y con el objetivo de construir la soberanía pedagógica, la Asociación Gremial del Magisterio de Entre Ríos (Agmer) lanzó este miércoles los cursos de formación  Política, Pedagógica y Sindical, que beneficiarán a más de 10.000 educadores. “Hoy tenemos una planificación estratégica para  provocar rupturas al discurso hegemónico del poder”, aseguró a AIM el secretario general de la entidad, César Baudino. 

Con visión transformadora, Agmer lanzó los cursos de formación Política, Pedagógica y Sindical.

La casa de la seccional Paraná de la Agmer, ubicada en Laprida 136, espacio donde se forjó la vanguardia del gremio, se proyectaron las estrategias de lucha por un proyecto de país y se discutieron reivindicaciones históricas, fue testigo esta mañana del lanzamiento de un proyecto trascendente y trasformador: los cursos de formación Política, Pedagógica y Sindical.
El moderno edificio, remodelado hace poco tiempo y con amplios servicios para sus afiliados, se llenó este miércoles de trabajadores de la educación de toda la provincia: conducciones departamentales; dirigentes de la comisión directiva central; representantes obreros en el CGE y el Iosper;  responsables de formación sindical y secretarios de educación. La expectativa del comienzo dio paso después a la expansión de la alegría de los presentes, beneficiarios directos de esta capacitación que apunta a construir y ejercer la soberanía pedagógica.
Jorge, un educador oriundo de Bovril, aseguró a AIM que la posibilidad de ser receptor de estos cursos le llenó el pecho “de alegría y emoción. Esto es ejercer la soberanía pedagógica: ser receptores y después transmisores, para que cada uno construya con su propia visión la realidad de los entrerrianos en el contexto del America Latina y la Argentina”, dijo.
Baudino/ “Provocar rupturas al discurso hegemónico del poder”
El secretario general de la Agmer, César Baudino, aseguró a AIM que la entidad sostiene el concepto de soberanía pedagógica y destacó que “intentando darle forma, hoy tenemos una planificación estratégica de provocar rupturas al discurso hegemónico del poder, llámese éste ley nacional de Educación, su correlato provincial, la decisiones de los ministerios que son parte y producto de elaboraciones foráneas, fundamentalmente del Banco Mundial”.
El dirigente recalcó que no es intención del sindicato “quedarse sólo en la crítica de esas situaciones, sino que entendemos que es importante trabajar con  una multiplicidad de compañeros con un camino propio, donde produciremos didáctica y conocimiento. Ese conocimiento será impreso después por la Editorial Agmer-Escuela Pública Siempre y se socializará hacia fin de año en el tercer Encuentro Latinoamericano de Educadores Populares por la Alfabetización”.
Baudino no ocultó su alegría porque “la disputa con el poder hegemónico se realiza desde la propuesta, desde los lugares en los que nos toca militar, en este caso desde la educación. Por eso, a la soberanía territorial, a la de los cuerpos, se suman otras; como nuestro campo específico es el de educación, hablamos de soberanía pedagógica”

Soberanía pedagógica, un concepto vigente en los cursos de formación.
El gremialista explicó que estas experiencias se realizan “en algunos casos aislados; lo que hacemos es reunir a militantes del campo popular que vienen trabajando en forma aislada y hoy tratamos de articular esos pensamientos críticos, para que el pensamiento sea movilizador, de lucha, de cuestionamiento y de rupturas de esas continuidades. Intentamos, en este contexto de la hegemonía que no termina de morir, buscar algo nuevo que no termina de nacer. Estamos transitando ese camino, y este hecho nos llena de felicidad”.
Baudino aseveró que este año “más de 10.000 compañeros estarán discutiendo, reflexionando y proponiendo alternativas a este sistema de muerte, de expropiación de los bienes públicos y comunes. Reivindicamos muchas alternativas en América Latina, como el buen vivir que han planteado los pueblos originarios de Bolivia y Perú; en ese camino, queremos construir nuestra propia genealogía: no queremos historias de museos, sino que pretendemos historias de ese simbolismo que se constituyan en luchas. Estamos muy contentos por esta iniciativa que comenzó a andar sin ningún formato preestablecido; que comenzamos a darle forma y a corporizar en la soberanía pedagógica”.
Cogno/ “Un espacio de lucha”
En diálogo con esta Agencia, la vocal gremial en el Consejo General de Educación (CGE) Susana Cogno, relató que la actividad de este miércoles corresponde al proyecto de capacitación Política y Sindical de Agmer. “Para nosotros, el trabajo permanente en la formación de los trabajadores de la educación es un espacio de lucha, en la formación de la dirigencia. Es de trascendental importancia articular en un proyecto todas las acciones de formación que la Agmer realiza a lo largo de sus 30 años de recorrido como sindicato mayoritario de los docentes en Entre Ríos”.

Trabajadores de la educación de la provincia, acompañaron el lanzamiento de los cursos.
Las iniciativas se articularán en  las sedes regionales, donde se trabajará con dos claves fundamentales: “un proyecto de auto capacitación sumamente innovador, denominado Somos Andando, que se reproducirá en cuatro zonas provinciales, y el de Capacitación Pedagógica, Política y Sindical, que tiene como base desarrollar una categoría de la soberanía pedagógica, que presenta al educador discutiendo, pensando y trabajando en lo que es esencial en su tarea: el acto de educar. Estamos convencidos que en función del trabajo diario que desarrollamos con seres humanos, en medio de una pedagogía que debe estar basada en el diálogo, en la comunicación y en la democracia, es de vital importancia el papel que cumplen los sujetos en la educación, sean los trabajadores o los educandos como los sujetos niños, jóvenes y adultos”.
Para Cogno, los cursos “tienen que ver con un profundo sentido de batalla cultural, para que se instale en la cultura, trascienda en el trabajo de las aulas e influya y se trabaje en conjunto con la comunidad. Todos los proyectos de formación que tiene la Agmer son producto del debate interno con los docentes en todas y cada una de las escuelas que deciden los ejes sobre los cuales se hará hincapié”.
Algunos protagonistas
AIM acompañó la jornada y en ese contexto charló con algunos de los protagonistas. El artista visual Juan Barbagelatta indicó a esta Agencia que el objetivo de su participación en los cursos de Agmer es “apoyar el concepto de soberanía pedagógica. Me parece fundamental por cómo está hoy el país, ya que sirve para movilizar una reflexión sobre los efectos del capitalismo sobre nuestra cultura cotidiana de vida”.
Para el director de teatro y educador Rubén Clavenzani, “es un desafío sumarme a esta iniciativa. El año pasado fui invitado por la seccional Paraná de Agmer para participar y así  trabajé en María Grande, Cerrito y Paraná. Fundamentalmente, el objetivo de este año es continuar trabajando con un grupo de educadores que  hace teatro, música, y otras actividades, y está ligado a la pedagogía de la liberación, más allá de las connotaciones que cada uno le quiera dar”.

Barbagelatta, Clavenzani y Satler comparten experiencias.
Clavenzani reforzó la idea de que “el hombre debe tomar conciencia que tiene un talento, y regar la planta que tiene adentro para que lo haga libre y pueda elegir. Ampliar los códigos de comunicación, no quedarnos con lo que los medios y programas de turno imponen y colonizan y que en la tarea áulica formal o no formal de la docencia,  a través del teatro en mi caso posibilite otras herramientas. Lo importante es pararse y sentirse seguros para transferir y que ese conocimiento sea multiplicado: es una de las estrategias que demanda la educación en su conjunto”.
El músico Gustavo Satler recordó que el año pasado fue convocado por Agmer central. “Trabajamos con talleres en distintos puntos de la provincia con la temática de la creatividad como un eje central y con la idea de que nuestra escuela sigue funcionando con el mismo sistema en que fue creada. El desafío es encontrar nuevas herramientas donde el espacio creativo –y no sólo en el arte- sino en cualquiera de las asignaturas en que se trabaje, sea fundamental para el desarrollo completo del ser humano”.
Para Satler, el trabajo creativo “ayuda a pensar libremente y a expresar lo que uno siente, sea en forma artística o en otra instancia”.
El músico, que hace unos años realizó con Barbagelatta la muestra de arte digital “La divina república”,   dijo que la iniciativa de Agmer “es una suerte de disparador a lo que adherimos a ultranza, que es el libre pensamiento y la soberanía pedagógica”.
El doctor Sergio Schlimovich, médico especialista en Endocrinología y Metabolismo y experto en elaboración de Proyectos de Salud, será el coordinador del curso “Agmer Promotora de la Salud – Formación para Sindicalistas”.
En diálogo con AIM, el profesional indicó que la iniciativa consiste “en formular una estrategia base para crear un curso de formación de sindicalistas de Agmer promotores/as de la salud, ‘focalizado’ en el diseño, desarrollo e implementación de programas de gran calidad en promoción de la salud y prevención de enfermedades en los lugares de trabajo docente”.
Schlimovich señaló que se pretende “mejorar y aumentar los niveles de  salud positiva de sus afiliados, y tomar cualquier medida que permita reducir la probabilidad de aparición de una enfermedad o bien interrumpir o aminorar su progresión. Se busca que la formulación final del curso sea original e innovadora, y que de respuestas prácticas y efectivas a los problemas reales que tienen los docentes de la provincia”.
Sobre por qué  es importante la promoción y prevención en salud, el médico detalló que “existe un largo camino entre la salud y la enfermedad, que puede llevar en ocasiones, muchos años. Hay áreas de acción en salud donde se actúa muy poco ‘por varias razones’, y es allí donde la mayoría de las afecciones y enfermedades son prevenibles. Habitualmente solo vemos ‘la punta del icberg’ de todo lo que se puede hacer en salud. Forma parte de esa punta el sistema asistencial que es donde, por ejemplo, acudimos cuando nos enfermamos para curarnos; pero debajo hay un volumen inmenso de hielo que representa el área de promoción y prevención, donde se actúa muy poco, y donde existen tremendas oportunidades para actuar, que no es solo prevenir enfermedades sino reforzar la salud para mantenerse lo más sano posible”.
El profesional destacó que aceptó sumarse a la propuesta de  Agmer porque “mi iniciativa, desde la salud, es consonante con el desafío transformador que se plantea para la educación desde este sindicato. Tenemos una gran necesidad de cambios que favorezcan, no solo el conocimiento nuevo, que es dinámico, sino que debe ir acompañado de acciones concretas y realistas para mejorar –fundamentalmente- la calidad de vida de los entrerrianos”.
A quienes están dirigidos
Podrán beneficiarse de los cursos los delegados en todas y cada una de las escuelas de la provincia,  que se constituyen “en los primeros y más importantes dirigentes del sindicato, ya que son los nexos que nos relacionan en esa vida política e institucional muy rica que tiene la Agmer como entidad. Las acciones de capacitación de 2011 están dirigidas al conjunto de los trabajadores de la educación”, explicó Cogno.
Inicio y duración
Los cursos comenzarán en abril y se extenderán hasta noviembre y diciembre, y en algunos ya se realizan las inscripciones. Algunos son de formación y cuentan con resolución del CGE como aval. La oferta de Agmer en formación sindical se proyecta con determinados cupos en función de las demandas.

Recomendaciones para un uso No Sexista del Lenguaje


UNESCO -  La organzación editó un manual para un uso no sexista en el lenguaje bajo el entendido que "El lenguaje no es una creación arbitraria de la mente humana, sino un producto social e histórico que influye en nuestra percepción de la realidad. Al transmitir socialmente al ser humano las experiencias acumuladas de generaciones anteriores, el lenguaje condiciona nuestro pensamiento y determina nuestra visión del mundo".

Los prejuicios sexistas que el lenguaje transmite sobre las mujeres son el reflejo del papel social atribuido a éstas durante generaciones.
A pesar de que el papel de las mujeres en la sociedad ha experimentado desde principios de nuestro siglo, particularmente en las últimas décadas, profundas transformaciones, los mensajes que el lenguaje sigue transmitiendo sobre ellas refuerzan su papel tradicional y dan una imagen de ellas relacionada con el sexo y no con sus capacidades y aptitudes, intrínsecas a todos los seres humanos.

Habrá quizá quienes piensen que intentar liberar el lenguaje de ciertos usos lingüísticos sexistas equivale a poner la carreta delante de los bueyes, ya que el lenguaje, que refleja los prejuicios sexistas acumulados durante generaciones, no cambiará hasta que la igualdad de las mujeres con los hombres no se sancione realmente en la práctica y. consecuentemente, los prejuicios sexistas que el lenguaje transmite vayan desapareciendo paulatinamente con el tiempo. Sin embargo, pese a su dimensión conservadora y su carga tradicional, el lenguaje, por su estrecha relación dialectica con el pensamiento, puede cambiar gracias a la acción educativa y cultural, e influir positivamente en el comportamiento humano y en nuestra percepción de la realidad.

martes, 12 de abril de 2011

Serge Latouche, Huella ecologica

En los últimos veinticinco años, este «objetor de crecimiento» -como a él le gusta de definirse- ha contribuido, como muy pocos otros intelectuales, a la clarificación y a la maduración del concepto en torno el cual se han fundamentado los nuevos movimientos globales. Durante los años setenta pasó muchos en África occidental, desde dónde maduró su pensamiento, que de las posiciones marxistas tradicionales lo llevaron a una crítica radical de la ideología del «progreso» y del «desarrollo», incluso en sus versiones de izquierdas.
Esta maduración lo llevó, en 1981, a fundar con Allain Caillé el MAUSS (Movimiento AntiUtilitarista en las Ciencias Sociales) y la revista homónima (que también cuenta con una edición italiana). De entre su extensa obra, destacan L'Occidentalisation du monde (La Découverte, 1989); La Planète des naufragés (La Découverte, 1991); L'Autre Afrique, entre don et marché (Albin Michel, 1998); Justice sans limites (Fayard, 2003), Survivre au développement (Mille et Une Nuits, 2004), y La apuesta por el decrfecimiento: cómo salir del imaginario dominante? (Icaria, 2008).

Nos preguntamos cómo es posible que un pensamiento y una obra como la de este bretón sea tan desconocida en nuestras latitudes. La respuesta la daba no hace mucho tiempo el filósofo Ramon Alcoberro, al hablar de pensadores como Latouche, Ellul, Castoriadis o Rist: «Son unos nombres que nadie bien educado no pronuncia ni en broma en una facultad universitaria como es debido -o que se plagian patéticamente cuando alguien quiere hacer la pelota a los antiglobis».

¿Qué es el decrecimiento?

El término decrecimiento se usa de hace bien poco en el debate económico, político y social, aun cuando el origen de las ideas que comporta tiene una historia más o menos antigua. Hasta estos últimos años la palabra no figuraba en ningún diccionario económico y social, mientras se encuentran algunas entradas sobre sus correlacionales «crecimiento cero», «desarrollo sostenible» y, claro está, «estado estacionario». Aun así, ya posee una historia relativamente compleja y un incontestable peso analítico y político en economía. Hace falta, todavía, entender sobre su significado. Los comentaristas y los críticos más o menos malévolos hacen constar la antigüedad del concepto para liquidar más fácilmente el alcance subversivo de las propuestas de los «objetores de crecimiento».

No se trata, efectivamente, ni del estado estacionario de los viejos clásicos, ni de una forma u otra de regresión, recesión, «crecimiento negativo», ni tampoc del «crecimiento cero», aunque por todas partes podamos encontrar una parte de la problemática. Precisemos, acto seguido, que el decrecimiento no es un concepto y, en cualquier caso, no es simétrico del crecimiento. Es un eslogan político con implicaciones teóricas. Apunta a romper el lenguaje engañoso de los drogadictos del *
productivismo.

La palabra de orden del decrecimiento también tiene sobre todo por objeto marcar fuertemente el abandono del objetivo del crecimiento por el crecimiento, el motor del cual no es otro que la búsqueda del provecho por quienes detentan el capital y las consecuencias del cual son desastrosas para el medio ambiente. En rigor, se debería hablar de un «a-crecimiento», como se habla de a-teismo, más que de un de-crecimiento. Se trata, pues, muy precisamente del abandono de una fe o de una religión: la de la economía, la del crecimiento, la del progreso y la del desarrollo.

¿Qué diferencía el decrecimiento y el denominado desarrollo sostenible?

Si trazamos la historia del concepto de desarrollo nos encontramos en su origen con la biología evolucionista, que lo sitúa, pues, en la historia de las ciencias occidentales dónde nació. Ya antes de Darwin los biólogos distinguían, para los organismos, el crecimiento del desarrollo. Un organismo nace y crece, es su crecimiento, cuando crece se modifica; una semilla no se convierte en una gran semilla, sino en un roble por ejemplo, y este es su desarrollo. Pero el crecimiento no es un fenómeno infinito y al final de un cierto tiempo el organismo muere.

Los economistas han transpuesto esta palabra de manera metafórica al organismo económico, ¡pero se han olvidado de la muerte! Ya se ve, pues, a partir de aquí que el concepto es perverso porque incorpora en él mismo aquello que los griegos llamaban hubris, la desmesura. Hemos entrado en un ciclo perverso de crecimiento ilimitado, crecimiento del consumo para hacer crecer la producción que, a su vez, hace crecer el consumo y así sucesivamente. Ya no se trata, pues, de llegar a un cierto estadio de bienestar o de satisfacción. Al contrario, esta satisfacción siempre es rechazada hasta el infinito. Es del todo absurdo, sólo podría ser matemáticamente. Efectivamente, una tasa de crecimiento continuo del 2 al 3% anual, conduciría al organismo económico a crecer setecientas veces en un siglo -contando los intereses compuestos. O vivimos en un planeta finito.

Aquí nos enfrentamos al famoso «teorema del nenúfar». Si un nenúfar coloniza un estanque doblando su superficie todos los años, quizás tardará cincuenta años en colonitzar la mitad, pero sólo le hará falta un año para ocupar la mitad restante. Estamos en este punto, es lo suficiente claro con el petróleo, los bosques, la pesca, el cambio climático. Nos hemos creído que lo podíamos colonizar todo sin problemas y hoy comprendemos que ahora todo desaparecerá en muy poco tiempos.
La idea de un desarrollo sostenible no es, entonces, un principio de solución. Al contrario, es el oxímoron por excelencia. El modelo de desarrollo seguido por todos los países hasta hoy es fundamentalmente no sostenible. Se puede, como se hizo en una época comparar el socialismo soñado con el socialismo realmente existente, comparar el desarrollo soñado con el desarrollo realmente existente. El desarrollo, el único que se conoce, finalmente se resume en «siempre hacer más de la misma cosa», sea el que sea el adjetivo que se adjunte. En treinta años de participación personal en proyectos en el Tercero Mundo y esencialmente en África, he visto el desarrollo -denominado sucesivamente socialista, de participación activa, cooperativo, autónomo, popular- tener los mismos resultados catastróficos.

Hace falta recordar a menudo que, como dijo Nicholas Georgescu-Roegen, «el desarrollo sostenible no puede ser en caso alguno separado del crecimiento económico», incluso si un no se puede reducir al otro, como el desarrollo de la planta reposa sobre el crecimiento de la semilla, y que esta lógica de crecimiento es incompatible con la finitud del planeta. El desarrollo no sabría ser ni duradero ni sostenible. Si se quiere construir una sociedad duradera y sostenible, hace falta salir del desarrollo y en consecuencia salir de la economía puesto que ésta incorpora, en su misma esencia, la desmesura.

¿Cuáles han sido y son los teóricos del decrecimiento?

El proyecto de una sociedad autónoma y ecònoma que abraza este eslogan no es de ayer. Sin remontarnos a ciertas utopías del primer socialismo, ni a la tradición anarquista renovada por el situacionismo, ha sido formulada bajo una forma próxima a la nuestra desde finales de los años sesenta por Ivan Illich, André Gorz y Cornelius Castoriadis. El fracaso del desarrollo en el Sur y la pérdida de referentes en el Norte llevó a muchos pensadores a cuestionar la sociedad de consumo y sus bases imaginarias: el progreso, la ciencia y la técnica. La toma de conciencia de la crisis del medio ambiente que se produce en el mismo momento, aporta una nueva dimensión.

Los autores del informe del Club de Roma (Meadows, Randers y Behrens) ya tenían la convicción, en 1972, que la toma de conciencia de los límites materiales del medio ambiente mundial y de las consecuencias trágicas de una explotación irracional de los recursos terrestres era indispensable para hacer emerger nuevas maneras de pensar que debían conducir a una revisión fundamental, a la vez del comportamiento de los hombres, y, por consecuencia, de la estructura de la sociedad actual en su conjunto.

La idea de decrecimiento tiene, pues, una doble filiación. Se forma, de un lado, en la presa de conciencia de la crisis ecológica y, de otro, al filo de la crítica de la técnica y del desarrollo.

La simplicidad radical preconizada, entre otros, por Jim Merkel, desde los Estado Unidos, se acerca al decrecimiento de Serge Latouche? Es decir, se podría hablar d-una ideología y de un decrecimiento global a nivel planetario?

Sí y no. En su libro La convivencialedad (Cuaderno CIDOC, Cuernavaca, México, 1972; Joaquín Mortiz ed., Planeta, 1985), Ivan Illich preconiza la «sobria embriaguez de la vida». Illich dice que en la condición «humana» actual, en la cual todas las tecnologías se hacen tan invasoras, él no sabría encontrar más alegría que en lo que diría un tecno-joven. La limitación necesaria de nuestro consumo y de la producción, el paro de la explotación de la natura y de la explotación del trabajo por el capital, no significan un «regreso» a una vida de privación y de trabajo. Esto significa, al contrario -si se es capaz de renunciar al confort material- una liberación de la creatividad, una renovación de la convivencialitat, y la posibilidad de llevar una vida digna.
 La búsqueda de la simplicidad voluntaria, o si se prefiere, de una vida austera, no tiene nada que ver con un prejuicio de frustración masoquista. Es la elección de vivir de lo contrario, de vivir mejor de hecho, y más en armonía con las propias convicciones, reemplazando la carrera de los bienes materiales por la búsqueda de valores más satisfactorios. Las raras familias que escogen vivir sin televisión no son de lamentar. A las satisfacciones que les podría ofrecer el tragaluz mágico, prefieren otras: vida familiar o social, lectura, juegos, actividades artísticas, tiempo libre para soñar y simplemente disfrutar la vida Este camino es evidentemente, en general, progresivo, aunque las presiones contrarias de la sociedad sean fuertes. Es un camino que pide dominar los propios miedos, miedo al vacío, miedo a la carencia, miedo al futuro, miedo también a no estar de acuerdo con los moldes prefabricados, miedo de desmarcarse con relación a las normas en vigor. Es la elección de vivir ahora más que no sacrificar la vida presente al consumo o a la acumulación de valores sin valor, a la construcción de un plan de ahorros o jubilación encargado para hacer frente al miedo de no tener lo suficiente. Una reflexión más reposada sobre la huella ecológica permite, aun así, captar el carácter sistémico del «sobreconsumo» y los límites de la simplicidad voluntaria.

En 1961, todavía, la huella ecológica de Francia se correspondía apenas a un planeta contra los tres de hoy. ¿Quiere decir esto que en los hogares franceses comían tres veces menos carne, bebían tres veces menos agua y vino, quemaban tres veces menos electricidad o gasolina? Seguramente no. Solamente que, ¡el pequeño yogur con fresas que comemos hoy todavía no incorporaba sus 8.000 km! La ropa que llevamos tampoco y el bistec devoraba menos grasas químicas, pesticidas, soja importada y petróleo.

De cualquier manera, el cambio de imaginario, si no nos decidimos, comporta igualmente, múltiples cambios de mentalidades que en parte están preparadas por la propaganda y la imitación. Hace falta que las mentalidades «basculen» para que el sistema cambie. La clase de círculo, tipo huevo y gallina, implica iniciar una dinámica virtuosa.

¿Debería pasar alguna especie de catástrofe natural o accidental para que los gobiernos se tomen seriamente la idea de decrecer?

Desgraciadamente, es probable. No sé si del fin del petróleo, por ejemplo, podemos decir que es una catástrofe. Para mí más bien sería una buena nueva. El petróleo habrá sido una catástrofe para la humanidad cuando se ve la cantidad de sangre y de lágrimas que habrá hecho derramar. Hay fenómenos límite y el agotamiento de los recursos naturales es uno de ellos. También puede haber, efectivamente, catástrofes naturales engendradas por el desajuste climático, países que desaparecerán bajo el agua, otros que se helarán, generando cientos de miles de emigrantes por el medio ambiente. Se perfilan otros fenómenos. Se habla poco de ello, pero la industrialización en China provocará (a imagen de la de Inglaterra, que condujo a la emigración a Australia, Nueva Zelanda o los Estados Unidos de entre dos a tres millones de proletarios) la salida de los campos de tres a quinientos millones de chinos, que se convertirán en vagabundos -que ya empiezan a serlo, que se sublevan o se suicidan.

Asistiremos al más gran desarraigo planetario de toda la historia. Esto puede provocar efectos de quiebra considerables. Empezamos a sumar efectos ecológicos, sociales y catástrofes más o menos naturales en los desajustes de la economía misma. Vivimos, en efecto, en una economía de casino, en una especie de burbuja mantenida artificialmente por una huída hacia delante, en una economía de crédito, de anticipación -la economía americana, a manera de ejemplo, vive aproximadamente a tres años vista. Es el equilibrio del ciclista, siempre se debe pedalear más deprisa para poder mantenerse, incluso si se sabe que aquello acabará contigo. Si todo se estropea, esto puede hacer mucho daño.

Lo que mejor se puede desear es que las catástrofes sean lo suficientemente fuertes para desvelar a la gente, hacerles cambiar la manera de ver las cosas, pero que no acontezca la sexta extinción de las especies, de la cual seríamos los autores al mismo tiempo que las víctimas.

¿Qué medidas prácticas, que puedan ser asumidas por los ciudadanos del primer mundo, pueden ser llevadas ahora y aquí para tender hacia el decrecimiento?

Medidas muy simples y casi anodinas en apariencia son susceptibles de poner en marcha los círculos virtuosos del decrecimiento. Se puede pensar en la transición con un programa que se sostiene en algunos puntos y que consiste en sacar las consecuencias «sensatas» del diagnóstico efectuado. Por ejemplo:

1. Volver a los años sesenta-setenta para la producción material, con una huella ecológica igual o inferior a un planeta.
2. Internalitzar los costes del transporte.
3. Relocalizar las actividades.
4. Adoptar el programa de la agricultura labradora de la confederación campesina (José Bové).
5. Impulsar la «producción» de bienes relacionales.
6. Adoptar el escenario Negawatt, es decir, reducir el derroche deenergía a un factor 4.
8. Penalizar fuertemente los gastos publicitarios.
9. Decretar una moratoria sobre la innovación tecnológica, hacer un balance serio y reorientar la búsqueda científica y técnica en función de las nuevas aspiraciones.

La internalización de las economías externas, en principio según la teoría económica ortodoxa, permitiría, si fuera llevada hasta las últimas consecuencias, realizar casi del todo el programa de una sociedad del decrecimiento. Todos los disfuncionamientos ecológicos y sociales podrían y tendrían que ir a cuenta de las empresas que son responsables. Sólo hace falta que imaginemos el peso del impacto de la internalización de los costes de los transportes sobre el medio ambiente, sobre la salud Evidentemente, las empresas que obedecen a la lógica capitalista quedarían ampliamente desanimadas. En un primer tiempo, un gran número de actividades ya no serían «rentables» y el sistema se bloquearía. ¿Pero no sería precisamente esta una prueba suplementaria de la necesidad de salir de este sistema y a la vez una vía de transición posible hacia una sociedad alternativa?

¿Cuál es la respuesta de los partidos verdes en Francia ante la idea del decrecimiento?

La idea hace su camino. Los verdes franceses han puesto el decrecimiento en su programa con una moción que ha obtenido el 60% de los votos.

¿Cómo se puede influir a nivel político local para extender esta idea?

La utopía local quizás es más realista de lo que creemos porque es de la vivencia concreta de los ciudadanos que provienen las esperanzas y las posibilidades. Takis Fotopoulos dice que presentarse a unas elecciones locales da la posibilidad de empezar a cambiar la sociedad desde abajo, lo que es la única estrategia democrática -contrariamente a los métodos estatistas (que se proponen cambiar la sociedad desde arriba amparándose del poder del Estado) y a los acercamientos llamados de la «sociedad civil» (que no apuntan en absoluto a cambiar el sistema). En una visión «pluriversalista», las relaciones entre las diversas polities en el seno del pueblo planetario podrían ser reglamentadas por una «democracia de las culturas». Lejos de un gobierno mundial, se trataría de una instancia de arbitraje mínima entre las polities soberanas de estatus muy diversos.

Raimon Panikkar afirma que la alternativa que trata de ofrecer (a un gobierno mundial) sería la bioregión, es decir, las regiones naturales dónde los rebaños, las plantas, los animales, las aguas y los hombres forman un conjunto único y armonioso Haría falta llegar a un mito que permita la república universal sin implicar en ello ni gobierno, ni control, ni policía mundial. Esto requiere otro tipo de relaciones entre las bioregiones. De cualquier manera, la creación de iniciativas locales «democráticas» es más «realista» que la de una democracia mundial. Si se excluye la posibilidad de hacer caer frontalmente la dominación del capital y de los poderes económicos, queda la posibilidad de la disidencia. Es también la estrategia de los zapatistas y del subcomandante Marcos. La reconquista o la reinvención de los «commons» (comunes, bienes comunes, espacio comunitario) y la autoorganización de la bioregión de Chiapas, siguiendo el análisis que hace Gustavo Esteva, constituye una posible ilustración de la estrategia local disidente.

¿Internet puede jugar algún papel ante estos retos?

Hay una interpelación en las nuevas tecnologías que justifica una reflexión sobre las formas renovadas de la política y de la democracia. Seguramente, éstas no se pueden realizar dentro del paradigma de la modernidad del mercado, que ya ha sabido recuperar internet para el supermercado electrónico planetario. Juzguemos provisionalmente la ambivalència de la técnica. Chico Mendes fue asesinado el 22 de diciembre de 1988 en el corazón de la Amazonia, en Xapuri. Como por azar el teléfono no funcionó durante las siguientes horas y los móviles todavía no existían. Hacían falta horas de marcha por la selva para llevar las noticias. Aun así, la difusión del hecho fue inmediata en Brasil y en el mundo entero.

Es que, si la web, hablando propiamente, no existía todavía, internet, imaginado en 1964 por Paul Baran para preservar las comunicaciones telemáticas militares en caso de ataque soviético, era utilizado desde los años setenta por los científicos para intercambiar informaciones; y las ONG norteamericanas, muy activas en la región, funcionaban ya a través de una red interconectada. Por esto, la movilización nacional e internacional fue muy rápida. En su edición del sábado 24 de diciembre, el Jornal do Brasil publicaba una página entera con una entrevista del líder amazònico hecha tres semanas atrás. Así, gracias a una técnica, inventada y puesta a punto por la CIA para ejercer un control planetario, el asesinato repugnante en la selva de un resistente a la opresión de la economía mundial, no quedó silenciado y, al acontecer un hecho global, ha podido transformar la conciencia planetaria. Desde el subcomandante Marcos, ha servido mejor al uso de la *uerrilla informática para popularizar la revuelta de Chiapas contra los «nuevos amos del mundo».

Es, pues, incontestable que ciertas nuevas técnicas dan instrumentos nuevos al combate para la emancipación. Aun así, a la vista de los desarrollos ulteriores de los ejemplos citados (la continuidad de las expropiaciones en la Amazonia, y esto con el régimen de Lula, y la liquidación subrepticia de los líderes indígenas de Chiapas), ¿no haría falta concluir, con el filósofo Jacques Poulain, que mientras esperamos el cambio del sistema, tenemos la posibilidad inaudita de hacer compartir de manera planetaria la constatación diligente de nuestra protesta impotente?

¿La idea de decrecimiento puede ser asumida y manipulada por el Sistema, como ha sucedido con la idea del desarrollo sostenible?

Difícil, pero no imposible, como se puede ver con los proyectos geopolíticos de la organización semisecreta de la élite planetaria Bildenberg. Un análisis mecanicista consiste en hacer remarcar que la población mundial ha estallado con la era del crecimiento económico, es decir, la época del capitalismo termoindustrial. La puesta a disposición de un recurso de energía abundante y barato, el petróleo, ha permitido un salto prodigioso y ha hecho pasar la población mundial de 600 a 6.000 millones de individuos. La desaparición de este recurso no renovable nos condenará a volver a una cifra de población compatible con las capacidades de carga sostenibles del planeta, poco más o menos la cifra de población anterior a la industrialización.

Esta es la tesis sostenida, particularmente, por William Stanton en su libro The Rapid growth off Human Population 1750-2000. Esta tesis es discutida de manera muy seria a escala mundial en el seno de ASPO, así como las perspectivas ecototalitarias que el autor concluye. Stanton dice que el escenario de reducción de la población con la mejor probabilidad de éxito debe ser darwiniana en todos sus aspectos, con ninguna de las sensiblerías que han arrullado la segunda mitad del siglo XX en la niebla espesa de lo políticamente correcto. Este escenario, presentado como un programa voluntario equitativo y tranquilo, apunta a una reducción progresiva de la población en 150 años a una tasa igual a la de la disminución del petróleo. Todo para evitar la pesadilla de una reducción brutal a través de guerras (incluidas las nucleares), masacres, hambre, etc. Los ingredientes, según Stanton, son los siguientes:

se prohíbe la inmigración y los que llegan sin autorización son tratados como criminales;
el aborto o el infanticidio son obligatorios si el feto o el bebè se revelan muy discapacitados (la selección darwiniana elimina a los inaptos);
cuando, por la edad adelantada, por un accidente o una enfermedad, un individuo es más una carga que un beneficio para la sociedad, su vida se para humanamente;
el encarcelamiento es raro, reemplazado por castigos corporales por los pequeños delitos y por la pena capital sin dolor en los casos más graves

El autor es consciente de la oposición a la puesta en práctica de su esquema y afirma que el obstáculo más grande en el escenario que tiene más oportunidad de éxito es probablemente (en su opinión) la devoción poco inteligente del Mundo Occidental por lo políticamente correcto. La respuesta es tan despiadada como el diagnóstico: a los sentimentalistas que no pueden comprender la necesidad de reducir la población de la Gran Bretaña de 60 millones a entorno 2 millones en los próximos 150 años y que se indignan por la proposición de sustitución de los derechos humanos por una fría lógica, William Stanton dice que los podría responder: «Ya habéis tenido vuestro momento» y para medirlo precisa que los actos de protesta violentos, como los que realizan los activistas por los derechos de los animales o los antiavortistas podrían, en un modelo darwiniano, atraer una pena capital. Esta referencia casi obsesiva al mundo darwiniano se reencuentra en muchos análisis de la geopolítica americana y no sin eco con el choque de civilizaciones de Samuel Huttington.

La apuesta de nuestro decrecimiento es otra. Y es que la aspiración a la justicia combinada con la sobriedad empujará a la humanidad hacia el camino razonable de una democracia ecológica más que no hacia un suicidio colectivo. 


I

domingo, 10 de abril de 2011

Noam Chomsky y las 10 Estrategias de Manipulación Mediática




El lingüista Noam Chomsky elaboró la lista de las “10 Estrategias de Manipulación” a través de los medios

1. La estrategia de la distracción 
El elemento primordial del control social es la estrategia de la distracción que consiste en desviar la atención del público de los problemas importantes y de los cambios decididos por las elites políticas y económicas, mediante la técnica del diluvio o inundación de continuas distracciones y de informaciones insignificantes. La estrategia de la distracción es igualmente indispensable para impedir al público interesarse por los conocimientos esenciales, en el área de la ciencia, la economía, la psicología, la neurobiología y la cibernética.
“Mantener la Atención del público distraída, lejos de los verdaderos problemas sociales, cautivada por temas sin importancia real. Mantener al público ocupado, ocupado, ocupado, sin ningún tiempo para pensar; de vuelta a granja como los otros animales (cita del texto 'Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.

2. Crear problemas y después ofrecer soluciones
Este método también es llamado “problema-reacción-solución”. Se crea un problema, una “situación” prevista para causar cierta reacción en el público, a fin de que éste sea el mandante de las medidas que se desea hacer aceptar. Por ejemplo: dejar que se desenvuelva o se intensifique la violencia urbana, u organizar atentados sangrientos, a fin de que el público sea el demandante de leyes de seguridad y políticas en perjuicio de la libertad. O también: crear una crisis económica para hacer aceptar como un mal necesario el retroceso de los derechos sociales y el desmantelamiento de los servicios públicos.


3. La estrategia de la gradualidad
Para hacer que se acepte una medida inaceptable, basta aplicarla gradualmente, a cuentagotas, por años consecutivos. Es de esa manera que condiciones socioeconómicas radicalmente nuevas (neoliberalismo) fueron impuestas durante las décadas de 1980 y 1990: Estado mínimo, privatizaciones, precariedad, flexibilidad, desempleo en masa, salarios que ya no aseguran ingresos decentes, tantos cambios que hubieran provocado una revolución si hubiesen sido aplicadas de una sola vez.
4. La estrategia de diferir
Otra manera de hacer aceptar una decisión impopular es la de presentarla como “dolorosa y necesaria”, obteniendo la aceptación pública, en el momento, para una aplicación futura. Es más fácil aceptar un sacrificio futuro que un sacrificio inmediato. Primero, porque el esfuerzo no es empleado inmediatamente. Luego, porque el público, la masa, tiene siempre la tendencia a esperar ingenuamente que “todo irá mejorar mañana” y que el sacrificio exigido podrá ser evitado. Esto da más tiempo al público para acostumbrarse a la idea del cambio y de aceptarla con resignación cuando llegue el momento.


5. Dirigirse al público como criaturas de poca edad
La mayoría de la publicidad dirigida al gran público utiliza discurso, argumentos, personajes y entonación particularmente infantiles, muchas veces próximos a la debilidad, como si el espectador fuese una criatura de poca edad o un deficiente mental. Cuanto más se intente buscar engañar al espectador, más se tiende a adoptar un tono infantilizante. Por qué? “Si uno se dirige a una persona como si ella tuviese la edad de 12 años o menos, entonces, en razón de la sugestionabilidad, ella tenderá, con cierta probabilidad, a una respuesta o reacción también desprovista de un sentido crítico como la de una persona de 12 años o menos de edad (ver “Armas silenciosas para guerras tranquilas”)”.


6. Utilizar el aspecto emocional mucho más que la reflexión
Hacer uso del aspecto emocional es una técnica clásica para causar un corto circuito en el análisis racional, y finalmente al sentido critico de los individuos. Por otra parte, la utilización del registro emocional permite abrir la puerta de acceso al inconsciente para implantar o injertar ideas, deseos, miedos y temores, compulsiones, o inducir comportamientos…


7. Mantener al público en la ignorancia y la mediocridad
Hacer que el público sea incapaz de comprender las tecnologías y los métodos utilizados para su control y su esclavitud. “La calidad de la educación dada a las clases sociales inferiores debe ser la más pobre y mediocre posible, de forma que la distancia de la ignorancia que planea entre las clases inferiores y las clases sociales superiores sea y permanezca imposibles de alcanzar para las clases inferiores (ver ‘Armas silenciosas para guerras tranquilas)”.
8. Estimular al público a ser complaciente con la mediocridad
Promover al público a creer que es moda el hecho de ser estúpido, vulgar e inculto…


9. Reforzar la autoculpabilidad
Hacer creer al individuo que es solamente él el culpable por su propia desgracia, por causa de la insuficiencia de su inteligencia, de sus capacidades, o de sus esfuerzos. Así, en lugar de rebelarse contra el sistema económico, el individuo se autodesvalida y se culpa, lo que genera un estado depresivo, uno de cuyos efectos es la inhibición de su acción. Y, sin acción, no hay revolución!
10. Conocer a los individuos mejor de lo que ellos mismos se conocen
En el transcurso de los últimos 50 años, los avances acelerados de la ciencia han generado una creciente brecha entre los conocimientos del público y aquellos poseídas y utilizados por las elites dominantes. Gracias a la biología, la neurobiología y la psicología aplicada, el “sistema” ha disfrutado de un conocimiento avanzado del ser humano, tanto de forma física como psicológicamente. El sistema ha conseguido conocer mejor al individuo común de lo que él se conoce a sí mismo. Esto significa que, en la mayoría de los casos, el sistema ejerce un control mayor y un gran poder sobre los individuos, mayor que el de los individuos sobre sí mismos.

Nuevo reparto colonial del mundo


Reparto colonial del mundo en el S. XIX  /  Pulsar para ampliar

Mauro Santayana

Europa y los EE.UU. con su accionar hacia Libia están tratando de volver al siglo XIX, promoviendo un nuevo reparto colonial del mundo. En realidad nunca hubo independencia efectiva de las antiguas colonias. Mediante los artificios del comercio internacional y sobre todo de la circulación de capitales, se ha mantenido la dependencia económica y política de los países periféricos En los últimos veinte años con la globalización neoliberal aumentó el dominio de los países centrales. Razón tuvo Disraeli, el controvertido hombre de estado británico, cuando dijo que las colonias no dejan de ser colonias por el simple hecho de haberse declarado independientes.

Esa dominación indirecta no les basta: quieren volver al estatuto colonial abierto de par en par. Al percibir señales de insurrección general de los pueblos contra la opresión de quienes les responden en el poder toman la iniciativa de la represión preventiva. La doctrina de la guerra preventiva de Bush sigue vigente y está siendo actualmente aplicada por Francia y Gran Bretaña, por delegación de Washington. Los usamericanos bien intencionados que votaron a Obama descubren que no pueden cambiar el sistema a través de los procesos electorales. Como denunciara y previera Eisenhower el gran presidente republicano – y más importante militar del siglo pasado - quien domina el sistema es el “complejo industrial-militar”, con su actualmente repartida conducción entre el Pentágono y Wall Street.

El presidente Obama se parece, cada día más, a Bush. Aunque su objetivo final sea el mismo, se esmera en hablar tranquilamente con América latina mientras azuza a sus aliados contra Libia, en un movimiento de reconquista imperial del norte de Africa. Igual que Tony Blair en el caso de Irak, Cameron se dispone a hacer el trabajo sucio. Según el semanario alemán Focus, ya había en Libia comandos británicos varias semanas antes de la oficialización de la alianza.

El movimiento para la re-colonización por parte de las antiguas metrópolis, se desarrolla “pari passu” junto a la globalización. Y obedece al hipócrita discurso de que fuera de los modelos católicos y protestantes de la civilización occidental, todos los pueblos son bárbaros e incapaces de autogobernarse. La realidad es totalmente diferente: con el objeto de mantener los niveles de confort y de consumo de los países occidentales es necesario disponer de todos los recursos humanos y naturales de la periferia. El espacio asiático de saqueo se reduce mientras tanto debido al aumento de la población y del consumo conforme a los patrones occidentales – y el crecimiento de China. Pero todavía está el gas y el petróleo del Caspio por los que los usamericanos buscan controlar a Afganistán y amenazan a Irán. Mantener los manantiales petrolíferos de Medio Oriente y del Norte de Africa son su principal objetivo – a pesar de su hipócrita discurso sobre el medio ambiente.. La misma hipocresía se pone de manifiesto cuando declaran que no quieren alcanzar a Kadafy: su complejo residencial fue atacado con misiles por Obama, del mismo modo como lo hizo Reegan en 1986, matando a una hija del dirigente libio.

Al mismo tiempo les conviene asegurarse la provisión de minerales y de alimentos de América Latina y del Africa negra. Amenazados por la penetración de los chinos en el continente africano, están dispuestos a jugarse el todo por el todo, con tal de restaurar su antigua dominación. Y no faltan los socios menores, los subcontratistas del colonialismo como son los españoles y los italianos. Los españoles nostalgiosos de Carlos V y de Felipe II se unen a Obama, Cameron, Sarkozy. No existen diferencias entre Zapatero y Aznar: ambos son lo mismo, en sus esfuerzos por reconquistar América del Sur. Los italianos son menos insistentes saben que aunque caiga Kadafy, Libia no les será devuelta

Los neocolonialistas tratan de aprovechar una rebelión sin ideas, aunque justa, contra la corrupción y el poder dictatorial de los países árabes. Pero no es seguro que logren éxito

Los usamericanos siempre crean, estimulan y financian movimientos de oposición en los cuales su interés es desestabilizar los gobiernos y los sistemas políticos. Estamos recordando en estos días del 1964. Podríamos recordar todos los años anteriores, sobre todo del período 1945-1954 cuando Vargas, elegido presidente, creó los instrumentos económicos necesarios al desarrollo independiente, con grandes empresas estatales. Después de muerto el gran presidente Juscelino consiguió mantenerse gracias a la sabia opción política de movilizar a la nación en tareas para el crecimiento acelerado.

De modo que no debe sorprender que sus agentes y aliados, de los países musulmanes hayan estimulado el movimiento que se inició en Túnez de manera aparentemente accidental. Los jóvenes de los países islámicos estaban insatisfechos con su vida. Les faltan oportunidades de realización profesional y personal. Su libertad es limitada y su sueños se mueren ante una sociedad cerrada en si misma.

El último 21 de marzo, el New York Times publicó un artículo de un joven de 24 años, exitoso colaborador del respetable Consejo de Relaciones Exteriores de Nueva York, Mattew C. Klein en el que analiza la situación de los jóvenes estadounidenses y muestra que la situación de desempleo es similar a la de los jóvenes de los países pobres y de que sus sueños se hallan igualmente limitados. Podría haber mencionado también el desencanto con el gobierno del sector no alienado de la juventud de su país, con la corrupción parlamentaria y con el indecente comportamiento de las grandes corporaciones que están a la cabeza de Wall Street, con el belicismo de su país. El hecho de que haya libertad de prensa y elecciones periódicas no reduce el absolutismo esencial del sistema usamericano. El pueblo vota cada cuatro años, la prensa es libre, el sistema judicial funciona, aunque no siempre la suprema Corte juzga con imparcialidad. Pero aún así la libertad como en otras partes es un bien de mercado. Es necesario comprarla.

Los derechos humanos aun cuando proclamados en altisonantes declaraciones son también violados en los EE.UU. y en los países que les rinden pleitesía. Basta recordar lo que pasa en Guantánamo, lo que fue registrado en Abu Graib y las condiciones a que se halla sometido el soldado usamericano Bradley Manning en una prisión naval.

El pretexto de que la intervención en Libia se hace en nombre de los derechos humanos y de la protección a los civiles es inmoral. Y considerada insensata hasta por los mismos parlamentarios británicos, como lo hace el diputado Rory Stewart en un artículo publicado por la London Review of Books el día 18. Stewart no es un hombre de izquierda. Diputado por uno de los tradicionales reductos conservadores del Noroeste de Inglaterra el de Penrith and the Border, el parlamentario muestra conocimiento del tema. Formó parte de las tropas británicas en Irak y luego atravesó a pié Afganistán, como parte de un viaje más extenso, de 6 mil kilómetros, desde Turquía al Nepal que duró dos años.

Aunque conservador, Stewart considera un error la participación de su país en las cruzadas anti-islámicas. Justifica en parte la intervención en Yugoslavia, en nombre de la protección de las poblaciones civiles ante las amenazas de genocidio – pero no esta de acuerdo con las demás. Reproducimos algunos textos de su artículo “Here we go again”

Parecía doblemente improbable que Inglaterra interviniera algún día militarmente en un país como Libia. Aunque pobre en petróleo, Afganistán en Asia central fue visto por muchos musulmanes como objeto de ocupación por cruzados infieles comandados por Israel, y con el objetivo de establecer bases militares y obtener petróleo barato. Cualquier movimiento contra Libia, - país árabe musulmán, embarcado en una lucha sin tregua contra el colonialismo y sudando petróleo – daba la impresión de que sería visto como un movimiento extremadamente hostil y siniestro primero por sus propios vecinos árabes, pero también por el mundo desarrollado y hasta por los propios libios.

El caso Libia no responde ni siquiera a los criterios del derecho internacional como objetivo de la intervención militar. Kadafi es el poder soberano, no los rebeldes; no estaba realizando un genocidio, ni una limpieza étnica. En Bosnia la situación era diferente: en pocas semanas habían muerto 100 mil personas. Y la propia Bosnia –estado soberano aunque no reconocido por la ONU – pidió formalmente la intervención. El caso Kosovo fue menos claro, pero la intervención apuntó a Milosevic y llegó después de la guerra de los Balcanes que él iniciara forzando al éxodo a 200 mil personas con abundantes pruebas de la gran cantidad de atrocidades cometidas en nombre de preconceptos étnicos. Ese tipo de actitud en que se estima que una intervención militar es legal y que en 1999 parecía la quintaesencia de la gobernabilidad y del consenso global, dejo de ser un concepto dominante en Occidente.

Como diputado de la Cámara de los Comunes creo que tal vez haya llegado la hora de recordar que a pesar de su desgracia Afganistán y hasta Inglaterra pueden tener aún un papel constructivo en el mundo

Finalizando su artículo el parlamentario es sin embargo más pesimista y vuelve sobre los pretextos de los colonizadores:
“Nada me saca de la cabeza que el mayor peligro, no es la desesperación sino las irrefrenables decisiones, casi hiperactivas, el sentido de alguna obligación moral, el miedo de los estados-bandidos, de los estados fracasados, a perder nuestra “credibilidad”. Eso me hace temer que estamos al principio de una década de super intervención militar”

Rory Stewart (nacido en Hong Kong, de padres ingleses, educado en Inglaterra) confirma así el objetivo de otro movimiento colonialista, de nuevo “manu militari” de los viejos dominadores. Acosados por la falta de petróleo barato, se aferran al pasado buscando mantener su seguridad y su orgullo, como dueños del mundo.
Gramscimania.

Enviar contenido Tu nombre Tu email Nombre del receptor Email del receptor Añade tu comentario (opcional) Enviar De los mártires de Chicago a la 9 de Julio de Moyano


Hugo Moyano llamó a los sindicatos y a los trabajadores “a reventar la 9 de Julio” el 29 de abril, en conmemoración de la jornada luctuosa del 1° de mayo. La sociedad argentina oyó como el repique de una letanía esta beligerancia.
Desde luego, el líder de la CGT y principal aliado del gobierno kirchnerista no es un artífice de la lengua –no se trata, digamos, de un Leopoldo Lugones o un Juan L. Ortiz-. Es un conductor avezado –y no sólo de camiones-, tanto que ha conseguido, en nombre de sus representados, una porción de poder inédita en la historia argentina. Pero aún así, resalta, con bombos y platillos, la palabra que utilizó: reventar.
El diccionario de la Real Academia le otorga nada menos que dieciséis acepciones al verbo. La primera es la de “deshacer o desbaratar algo aplastándolo con violencia”. La cuarta es “molestar, cansar, enfadar”. La quinta es “causar gran daño a alguien”. La sexta, curiosamente, es “hacer fracasar un espectáculo o reunión pública mostrando desagrado ruidosamente”. La décima: “dicho de una cosa: abrirse por no poder soportar la presión interior”. La número quince es coloquial: “sentir y manifestar un afecto del ánimo, especialmente de ira: ‘Estoy que reviento’. La última refiere a “morir violentamente”. Salvo dos “brotar, nacer con ímpetu” y “tener ansia o deseo violento de algo”, la abrumadora mayoría expresa conceptos agresivamente negativos.
Más allá de la desconfianza debida ante los diccionarios, que pretenden ejecutar la desmesura de definir en pocas palabras todas las cosas, el etimológico de Corominas adjudica cierta modernidad al verbo y lo ancla en el siglo XIV: reventar vendría del latín vulgar “repentare” (salir de pronto), a su vez derivado del latín “repente” (repentinamente). La Real Academia discrepa: para ella viene del latín “re-ventus”, viento. Cosa de ellos.
En el diccionario del Habla de los Argentinos, de la Academia Argentina de Letras, no figura reventar, pero sí “reventado”: “Muy deteriorado físicamente, por lo común, a causa de una adicción”. El mismo sentido le otorga el diccionario del Lunfardo de Fernando Hugo Casullo, en que el aparece la palabra reventar como la acción de allanar un domicilio donde está reunida gente del hampa, estafar o robar, o simplemente morir.
La asociación con la muerte resulta recurrente. Para los argentinos no sólo se revientan granitos: reventar es sinónimo de matar o morir (“salí, que te reviento”, “finalmente, reventó”) como ya era de uso común respecto de los caballos en el siglo XIX, cuando se galopaba “a reventar caballos”, es decir, hasta que morían por el esfuerzo.
Reventar algo, como una avenida, se asocia, entonces, a deshacerla, pulverizarla. Muy lindo todo. La conmemoración del 1° de Mayo se refiere a una huelga por la jornada de ocho horas que se realizó en Chicago en 1886. Una de las manifestaciones fue reprimida por la policía, alguien tiró una bomba y un oficial murió. Hubo ocho detenidos, imputados por el crimen. En un juicio que fue un escándalo y un oprobio a la Justicia, los acusados –todos anarquistas- fueron declarados culpables; cinco fueron condenados a muerte. Uno de ellos se suicidó. Los restantes colgaron de la horca en noviembre de 1887.
En su nada cordial convocatoria al 29 de abril, Moyano desafió: “Vamos a demostrarles a quienes nos atacan si los trabajadores le creen a Clarín o le creen a Moyano”. La frase sonaría cómica sino tuviera calibre de amenaza, porque nada de esa materia está en juego el Día del Trabajador.
Pero la ironía se adueña de todo con una especie de smog punzante: de los cuatro “Mártires de Chicago” reventados en el cadalso, dos eran periodistas. Y de no lameculos del aparato propagandístico del gobierno de turno. La palabra figura, como bien se la entiende, en el diccionario de la Real Academia.


sábado, 9 de abril de 2011

Docentes nucleados en AGMER marcharon al CGE solicitando mayor presupuesto educativo

FAVORITISMO ,NEPOTISMO,CARADURISMO:UN LAXANTE Y VOMITIVO NATURAL

El empleo público crece aunque se diga que es necesario achicar el Estado, mejorar la burocracia o hacer igualitario el sistema de elección, y si bien se pregona que para la regularización laboral se realizan “exhaustivos análisis de cada una de las situaciones para cubrir las vacantes” y se efectúan “concursos con la máxima rigurosidad”, en muchos casos, esta premisa no se cumple, a pesar del reclamo de los sindicatos.
Pases a planta permanente: ¿iguales para todos?

El  29 de marzo, AIM publicó una información titulada: “Se regularizó la situación laboral de 496 agentes educativos” (ver nota relacionada). En concreto, el texto se refería a la regularización laboral de trabajadores que se desempeñaban como transitorios, y por resolución 0825 de Consejo General de Educación (CGE)  pasaron a planta permanente.
En la oportunidad, la titular del CGE, Graciela Bar, aseguró que  para tal fin se realizó “un exhaustivo análisis de cada una de las situaciones de revistas de más de 500 personas que podían cubrir las vacantes. Hicimos un concurso al igual que con los docentes, con la máxima rigurosidad”. La funcionaria calificó la jornada como “un día importante para el sistema educativo”,  aunque admitió que se había enterado “que había personal designado hacia más de ocho años; tal vez los agentes ni sabían que no tenían estabilidad, nunca se les había dado un cargo de planta permanente”.
Un caso concreto
Sin embargo, esta situación parece no haberse aplicado de manera igualitaria para todos, ya que en el caso del director Departamental de Escuelas del departamento Tala, Andrés Honorio Casaretto, sus dos hijos pasaron a planta beneficiados por la  resolución 0825 del CGE, a pesar de no haber rendido ningún concurso, constató AIM.
Se trata de Lucrecia Alejandra Casaretto, que quedará como personal administrativo en la Escuela numero 51 de Gobernador Maciá con categoría 10, y de Andrés Oscar Casaretto, quien brindará servicios en la dirección Departamental de Escuelas como Personal Obrero y Maestranza (con función de chofer), con un cargo que se creó ya que el joven no remplaza a nadie y la planilla, que observó AIM,  dice: “destinado por resolución número 1605/08 CGE”.
Qué ocurría antes
Hasta hace un tiempo, eran los directivos de las escuelas los que pedían  los cargos de administrativos, aunque si los trabajadores habían sido sugeridos por algún político, pasado  un tiempo se pedía conformidad acorde al desempeño del empleado. Si éste realizaba sus tareas con compromiso, se avalaba esa designación.
No obstante, la política y los favores ganan terreno sobre la legitimidad del sistema de concursos y listados de los docentes.
La historia muestra de qué manera las repúblicas antiguas se transformaron en monarquías. Primero los cargos rigurosamente electivos se prolongaron mediante la reelección o por “razones de necesidad”. Luego llegaron a hacerse vitalicios, y finalmente, en el último paso, hereditarios.
Otros casos
Presenciamos un deseo sin disimulos de los políticos de seguir en su cargo en el caso de que no puedan conseguir otro mejor. Un argumento de los intendentes entrerrianos para conseguir la reelección fue que en cuatro años no pueden desarrollar íntegro su programa de gobierno. Es decir, el programa nace con ellos y con ellos desaparece. Argumentan como si el programa fuera de ellos y no del partido del que fueron candidatos.
Como si fueran hombres providenciales, sin los cuales nada es posible, como Césares capaces de torcer el rumbo de la historia a fuerza de grandeza, aunque ellos y nosotros sepamos que tampoco los Césares eran capaces de esas hazañas y que ya no hay Césares por acá.
Si el programa es del partido, el partido habrá  formado los hombres capaces para llevarlo a cabo, y cuando termine el periodo de uno de ellos, propondrá otro a la consideración de los ciudadanos. Si a éstos les parece que semejante acción pública debe seguir, lo votarán, y si no, respaldarán a los opositores en el gobierno.
Después de todo, si fuéramos una verdadera nación, tendríamos un  proyecto nacional en que todos los partidos coincidirían. Estamos tan lejos de ser una república como los políticos que vemos aparecer en los medios a todo propósito de mantener un acuerdo siquiera una semana. En realidad, no se lo proponen.
Nepotismo: ¿ilustrado?
El nepotismo es la preferencia que tienen algunos gobernantes o funcionarios públicos para dar empleos públicos a familiares sin tomar en cuenta la competencia de los mismos para la labor, sino su lealtad o alianza.
Queda claro que los empleados públicos deben buscar satisfacer el bien público y no sus propios intereses y que quien acomoda a los suyos satisface sus intereses personales por encima de los comunitarios.
Lo que sucede con los contratos es que la mayoría de los casos, antes de que los funcionarios dejen el poder, autorizan a que pasen a planta permanente. Y así se suman empleados.
Otro dato: antes,  el empleo público estaba relacionado con una suerte de inclusión social. Actualmente eso quedó para los programas de empleos. Ahora el trabajo público es un estadio superior, que no apunta a la clase baja ya que prima más el compromiso político.
Según la Anses
En 22 de julio de 2007, el diario  La Nación publicó que, según datos de la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses), los aportantes al sistema previsional que dependen del empleo público registraron un crecimiento de un siete por ciento en 2006 frente al año anterior. En ese período se sumaron 161.000 nuevos empleados públicos, a razón de 441 por cada día hábil, contando los feriados.
Así, “la Nación, las provincias y los municipios no pierden el tiempo en materia de contrataciones. Si se realiza la cuenta por cada orean 2007 se sumaron, en todo el país, 18 empleados por cada 60 minutos”.
Fuente: AIM y La Nación

jueves, 7 de abril de 2011

Una deuda impagable

Entre Ríos, “tiene una deuda con el monte nativo”

Aseguran que Entre Ríos “tiene una deuda con el monte nativo”
Entre Ríos “tiene una deuda con el monte nativo y San Luis es un ejemplo a imitar por el pacto en cuanto al cuidado del ambiente”, dijo a AIM la integrante de la Asociación Civil Vida Liliana Quinodoz, quien además informó que sigue adelante la Campaña de los mil millones de árboles, una iniciativa mundial de forestación.
En diálogo con esta Agencia, Quinodoz destacó que “2010 fue el año mundial de la diversidad biológica y San Luis es un ejemplo a imitar por todos y, en especial, por nuestra provincia que tiene una deuda con el monte nativo”.
En tal sentido, destacó que desde la entidad se considera que “no necesariamente hay que esperar a que las autoridades realicen campañas” y añadió que “cada uno de nosotros debe empezar por su hogar y por las escuelas”.
“También hay que cuidar los espacios públicos verdes que cada vez son menos, en especial en Concepción del Uruguay”, apuntó.
Reverdecimiento
Por otra parte, la ambientalista destacó que  sigue adelante la campaña de los Mil Millones de Árboles, una iniciativa mundial de plantación de árboles en la que se exhorta a los pueblos, las comunidades, el sector empresarial, la industria, la sociedad civil, las organizaciones y los gobiernos a concertar compromisos en línea para la plantación de árboles, según un documento que reproducen en el sitio web de la entidad.
“La campaña promueve enérgicamente la plantación de árboles autóctonos y de árboles que se adecúen a las condiciones medioambientales locales”, se especifica y además se remarca que “a finales de 2009, participantes de 170 países habían plantado en el marco de la campaña más de 7 400 millones de árboles – cifra que superó con mucho la meta de 7000 millones de árboles para fin de año”.
Por Noralí Moreyra, de Redacción AIM

miércoles, 6 de abril de 2011

“La lucha en la calle derogó la resolución 937” Es decir hizo retroceder una medida antipopular

Las movilizaciones de las comunidades educativas, padres, alumnos, docentes, “demostraron una vez más que con unidad, organización y lucha se pueden hacer retroceder medidas antipopulares como lo fue la resolución 937 del Consejo General de Educación (CGE)”, se informó a AIM desde la comisión directiva central de la Asociación Gremial del Magisterio (Agmer).

Padres de alumnos de la escuela Obispo Gelabert protestaron ayer sobre Avenida de las Américas.
La CD de Agmer recordó a esta Agencia cual es su representatividad. “Acompañamos y movilizamos a las escuelas primarias y de jornada completa contra la resolución 937 del CGE,  en su Anexo II,  norma exclusora sin diagnostico socioeducativo y con criterios economicistas, que impulsó la titular del organismo educativo provincial, Graciela Bar, sobre la categorización de escuelas”.
Más adelante, Agmer señaló que las movilizaciones de las comunidades educativas, padres, alumnos, docentes, “demostraron una vez más que con la unidad, la organización y la lucha pueden hacer retroceder medidas antipopulares, como lo fue la resolución 937”.
La resolución 1013
La resolución número 1013, fechada el 6 de abril de 2011, suspendió en su Anexo II la baja de categoría de establecimientos escolares y mantuvo la suba en otras. “Esto nos dio la razón”, se argumentó desde Agmer, aunque se advirtió que el reclamo no debe claudicar. “Exigimos mayor inversión en educación,  especialmente para las escuelas y sectores de la sociedad más vulnerados, y los que así no lo entiendan, que den un paso al costado.
El dato
Ayer,  las comunidades educativas de varias escuelas se manifestaron contra la resolución 937. Este miércoles, a través de la resolución 1013, el CGE suspendió el Anexo II de la norma 937, “hasta tanto los establecimientos educativos efectúen la presentación de la nueva planilla de organización institucional”.
El sindicato aclaró que “el Anexo I, donde se detallan las instituciones que suben de categoría, queda en plena vigenc